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Posted on Sun, Nov. 27, 2005
Tres bajo la sombrilla
JOSE ANTONIO EVORA
El Nuevo Herald

Robert Cole is an American sculptor known for his monumental work in stainless steel. He has his studio in Washington DC where he has also opened a Sculpture Park with two other artists.
The Damien B. Contemporary Art Center, at 282NW 36 ST, is exhibiting, for the first time in Miami, Robert Cole's series of sculptures from small pieces to the monumental, including one 18 feet tall to be shown outdoors. The sculptures are accompanied by study drawings which he has never before exhibited.
The presence among us of this sculptor from Washington, D.C. is more evidence of the impact of Art Basel in Miami, and at the same time how Miami can take advantage of "La Feria" to benefit environmental design. It is important to bring to light for both private and public commissions of urban megaprojects the work with an artist such as Robert Cole, who in his sixties has won prestige with his style of sculpture that can break the monotony of mall architecture.
Cole indicated: "In general I bring to the spectator enough reality in my work that they understand what is the initial idea, and enough distortion to maintain the attention and interest in the piece". "I also like to include abstract elements in it to provoke continuous contemplation through time."

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Posted on Sun, Nov. 27, 2005
Tres bajo la sombrilla
JOSE ANTONIO EVORA
El Nuevo Herald

Ya se va haciendo costumbre: durante todo el año, numerosas galerías de Miami trabajan simultáneamente en su habitual programa de exposiciones y en una en particular, la que abrirán en vísperas de la Feria Art Basel, cuya cuarta edición se celebrará desde este jueves 1ro. de diciembre hasta el domingo en el Centro de Convenciones de Miami Beach.

El simple hecho de estar aquí representa una tremenda ventaja: aún las galerías que no son elegidas para llevar a sus artistas a la muestra principal, caen en el radio de acción de los coleccionistas y de cuanto visitante inunda los circuitos artísticos locales durante los últimos días de noviembre y los primeros de diciembre. Tres de ellas, ubicadas en el Wynwood Art District, nos sirven ahora de botón de muestra.

Robert Cole es un escultor estadounidense conocido por sus trabajos monumentales en acero inoxidable. Tiene su estudio en Washington, donde ha abierto un parque de esculturas junto a otros dos artistas. Damien B. Contemporary Art Center, ubicada en 282 NW 36 St., lo trae por primera vez a Miami con una serie de piezas desde pequeñas hasta enormes --entre ellas una de 18 pies de altura, que instalará en exteriores--, a las cuales se añadirán bocetos nunca antes expuestos.

La presencia entre nosotros del escultor de Washington es otra prueba de lo que Art Basel está significando para Miami, y a su vez de cómo la ciudad puede aprovechar la feria en beneficio de su diseño ambiental. Nos viene muy bien que los comisarios privados y públicos de los megaproyectos urbanísticos entren en contacto con artistas como Cole, quien a sus sesenta y tantos años, aun sin ser propiamente uno de esos maestros cuya obra se estudia en las academias, ha ganado prestigio con un tipo de trabajo que sirve, digamos, para romper la monotonía de los malls.

''Por lo general le doy al espectador suficiente realismo como para que sepa cuál fue mi punto de partida, y suficiente distorsión para que no pierda el interés en la pieza'', ha dicho Cole. ``Me gusta incluir algún elemento de abstracción que convoque a seguir contemplándola al paso del tiempo''.

Dot Fifty One (51 NW 36 St.) ha estado, literalmente hablando, todo el 2005 en función de La Caperucita Roja. La galería de Alfredo Guzmán e Isaac J. Perelman, a quienes se unió Tzili Charney en la curadoría de esta muestra colectiva, le pidió a artistas de Argentina, Cuba, Estados Unidos, Gran Bretaña, Israel, Marruecos, México, Suiza y Venezuela que diera cada uno su muy particular visión del cuento. Ninguno supo lo que estaban haciendo los demás, y el resultado es extraordinario, sólo comparable en irreverencia y estupor al libro de James Finn Garner Politically Correct Bedtime Stories.

Aquí merecen espacial atención las piezas de los israelíes Tami Amit, Uri Katzenstein, Tal Schohat y Nati Shamia Opher --a quien recordarán quienes el año pasado vieron su instalación LandEscape--; la marroquí-estadounidense Miriam Cabessa, y el miamense Leonel Matheu. Las técnicas son tan variadas como las aproximaciones al tema: desde escultura e instalación hasta pintura y parodia de comic.

''¿Qué es lo que hace de este cuento una fuente tan rica para los artistas?'', se pregunta el texto de presentación. ``Su densidad en temas como la seducción, la traición, los albores del sexo, el tabú, el asesinato e incluso el canibalismo. La relación de temas tan fuertes con personajes familiares e inocentes desata una poderosa corriente que nos arrastra''.

Los niños no habían sido en ninguna de las ferias anteriores un grupo al que se prestara especial atención, más allá de las visitas dirigidas y otras actividades en las que fueran espectadores sujetos a la contemplación del arte. Edge Zones, el proyecto que Charo Oquet y David Vardi dirigen en el World Arts Building, de 2214 N Miami Ave., quiere convertirlos ahora en coleccionistas debutantes con la muestra colectiva My First Art Collection.

Oquet y Vardi les pidieron a un grupo de artistas locales que hicieran piezas dirigidas al público infantil, lo mismo una pintura original que un juguete intervenido. Un coleccionista, dicen, lo es de veras sólo si empieza a relacionarse desde temprano con obras que estimulen su deseo de comprar arte. Dudo que haya en todo este Art Basel un artista que haya recibido encomienda más difícil.

Como se sabe, los niños son los jueces más implacables. Si algo no les gusta, carecen aún de los prejuicios que podrían impedirles, como a los adultos, expresarse abiertamente sobre el objeto en cuestión. Aquí Oquet y Vardi están trabajando con una excelente idea, pero hay que ver el resultado. El precio de las obras oscilará entre $20 y $500, lo cual aleja el temor de que sean los padres quienes no deseen animar a sus hijos a convertirse en coleccionistas de arte.

jevora@herald.com